Santidelo y Freijon, vaya par de mastuerzos.

El día siguiente de su indisposición coeundi, Alberto se metió unas pirulas de fibegran y siguió marcha a Valencia. Alli aprovechó para añadir otra a su catalogo inagotable de virtudes, menoscabó la credibilidad de los datos de empleo de Díaz tirando de comentario sexista, ya sabemos que sabe mucho de maquillaje, dijo con lo que le sale cuando selecciona sorna. Hace unos años ya dijo a una diputada gallega que estaba «necesitada». Alberto es una joya. Cuando se hizo con el puesto ya gente de Galicia advirtió que ni moderado, ni gestor, ni preparado y efectivamente, unas semanas de exposición lo han mostrado en sus miserias. No es que hubiese acabado en una comunidad periferica por mala suerte con los tiempos políticos, es que debemos preguntarnos si no era excesivo premio para alguién tan memo.

Alberto es un tarugo de pasado sospechoso, que solo despacha mentiras o medias verdades, que carece de oratoria, con un historial gestor de mierda y que además es machista, un cobarde que se borra cuando la carretera se empina y a todo esto, no sabemos cuanto o por que conceptos cobra. Que alguién asi tenga opciones es la autentica excepción ibérica. Yolanda respondió invitandole a debatir las cifras del empleo donde y cuando quisiese, pero no se conoce respuesta.

Su sidekick no es mejor. En el último debate se erigió como defensor de la españa vaciada, que no son muchos votos, pero oye. Uno de los disfraces recurrentes de Abascal y su fauna es el de señorito Ivan. Pero claro, nadie le dice, a ver Santi, que tu eres de Amurrio, estudiaste en Deusto, llevas no se cuanto tiempo viviendo de las mamandurrias en Madrid. No sabes distinguir un alcornoque de una encina, ¿que cojones vienes disfrazado de venir de una montería? Su otra filia sabemos son el rollo militar, que es obvio esconde un no muy soterrado rollo gay. Abascal se disfraza de los distintos ejercitos y promete traer la mili de vuelta cuando agotó todas las prorrogas habidas y por haber precisamente para no hacerla. No Abascal no hizo la mili, ni por lo civil ni por lo profesional.

Pero bueno, ahi prometía solucionar el tema de la españa vaciada. Te tienes que descojonar. Hay varias verdades incómodas de esta españa que nadie cuenta. Una es que se ha dado un proceso acelerado de darwinismo inverso. Todos aquellos con capacidad o disposición o sin otro remedio que tuvieron que marcharse a buscarse la vida lo ha ido haciendo durante varias generaciones, asi que lo que queda son el conformista, el lerdo, el lento y aquel al que el mundo exterior le queda grande. Si, hay excepciones de gente que quiere su pueblo o tierra y tal, pero en un porcentaje minimo. Si ahora se quejan solo es por un motivo, lo que antes les beneficiaba (que la gente se fuese marchando y les dejase tierras y casas baratas y capacidad para hacer lo que les diera la gana) ahora les muerde. Pero es tarde.

Como yo si conozco el terreno, puedo afirmar sin duda alguna que jamás en la historia hemos tenido mejores comunicaciones, carreteras, autovias, y que estas no han servido para traer absolutamente nada, ni industrias, ni empresas ni población, sino para acelerar la marcha. Los silogismos que manejan simplemente no se cumplen. Pero bueno, ahi tienen a Juanito Gaga, un pijo de valladolid, no parece que las cifras de la castilla fantasma hayan mejorado gran cosa ni que se hayan tomado grandes iniciativas. Por otro lado, Santiago, el señorito Ivan fue el primero que dejó el terruño para irse a la capital.

Lo que no esta claro es que si es contrario a la emigración y a la recaudación fiscal, bueno, con quien piensa repoblar el campo, ¿con teleñecos?, ¿para que? ¿con que piensa pagar las infraestructuras que en gran mayoría no son necesarias de acuerdo a criterios poblacionales?, ¿con las subvenciones a partido que cobra él mismo religiosamente? Todo son preguntas. Por otro lado es extraño que parte del campo se vean reflejados en estos vendehumos cuando la mayoría son de entornos claramente urbanos y no han visto mas bostas que las que encuentran frente al espejo, bueno, ya dije antes lo del darwinismo inverso. Se han quedado los más tontos.

Con esta pareja de impresentables, un mentiroso gangoso y el mortadelo de la política cuesta pensar porque Sánchez, no digamos la prensa, han sido tan tibios. Son unos candidatos tan mierdosos, son tan burdos sus mensajes y propuestas como acabo de decir con la españa vaciada, que piden a gritos que desmonten su mediocridad a toñas y en verdad da vertigo pensar que pueden hacer desde puestos de poder. Como han llegado estos anormales ahí ya es algo de hacerse mirar.

La espantá, el día que a Albertito le dolía la tripita.

De acuerdo a biografías de J.F. Kennedy, el que se zumbaba a Marilyn, sufría fuertes dolores crónicos que le obligaban a estar continuamente medicado, ignoro si derivados de la mala vida que le daba la susodicha. Eran los 60, de acuerdo, la frontera entre el uso de drogas para el ocio o el dolor era ténue, pero lo importante es que JFK, aunque estuviese arrastrandose, daba el callo.

En el último debate AP Feijoo decidió que no, que no tenía el coño para farolillos. Vale, vale, incluso al más corto no se le escapa que APF no tiene nada que ver con JFK, pero vaya. A última hora fingió una molestia o un dolor, pero vamos, ya había dicho a los responsables que si sabían contar que con él no lo hiciesen. Curiosamente hoy sale en la portada del AS pidiendo cosas como un homenaje a Rafa Nadal. Gracias Alberto, nadie debe haber reparado en la carrera de Rafa hasta que no has venido tu.

Ante este plantón de nuevo nos topamos con que la pregunta más pertinente, más obvia, más evidente, no fue formulada por ninguna de las partes. Debe ser la campaña de obviar lo más importante y perderse en las ramas de lo accesorio. Si Feijoo no se atreve a comparecer en un debate a la presidencia, ¿que cojones podemos esperar en una situación de crisis? ¿que sucedera si Ursula lo llama al orden? ¿si los extraterrestres de Raticulin nos invaden?. ¿Dirá a su mujer que llame diciendo que Albertito no puede ir porque le duele la tripita?. A su catálogo de virtudes (falta de ética, indecencia, capacidad de expresión oral comprometida o nula en otros idiomas, faltas reiteradas a la verdad, carencia de escrupulos) Alberto añadió la falta de valentía, coraje, presencia y capacidad de afrontar circunstancias adversas. Se queda un candidato a presidente glorioso.

Pero no, nadie preguntó que puede esperarse de alguien que a las primeras de cambio escurre el bulto. Asi que nos queda elucubrar que miedos le apartaron de aparecer. Sánchez apuntó a la verguenza de verse retratado junto a Abascal, lo cual es comprensible, cualquiera debería experimentar bochorno de verse en el team Abascal. Pero habida cuenta de que todo hace indicar que de darles los números debieran entenderse cuesta pensar que fuese eso. Tira más a que no quería enfrentarse al fantasma de Marcial, fardos blancos, el pasado siempre vuelve. O a la posiblidad de que volvieran a poner coto a sus constantes y bastante pachangueras mentiras, que mira que con pasar el trance de la campaña callado hubiese ganado, pero es que miente ya por vicio, por afán. Igual tiene pesadillas con los platós de la 1, sospecho no los volverá a pisar hasta que exorticen el lugar y el obispo compostelano riegue eso con un chorrazo de agua bendita.

Alberto cuenta con que ya hay mucho voto rulando por España en sacas de correos, es decir, ya está decidido y que sus acérrimos ya le han perdonado sus amistades peligrosas, sus mentiras y hasta su ignorancia y cualquier cosa con tal de votar contra perro chanche. Pero su ausencia es tan injustificable y jodida de explicar que dudo nadie de su equipo pueda hacerlo ni lo intente. Se borró de manera cobarde y canalla en el único debate en que no debía faltar.

Dicho eso no voy a entrar en quien ganó o perdió. Un debate no es un partido de tenis donde la bola entra o no. Esa obsesión de quien gana o pierde antes de que acabe un debate es, aparte de idiota por el factor subjetivo, contraproducente. En un debate se confrontan ideas, se presentan propuestas, se puede estar más o menos acertado, pero no hay un marcador. Esa obsesión por buscar ganadores los ha empobrecido hasta reducirlos hasta un concurso de zascas cutron. Si quiero ver un concurso de hostias me pongo los certamenes de rusos dandose hostias a rodabrazo, no deberiamos permitir que herramientas democráticas se queden en eso. Por otro lado, ¿de que sirve que un candidato «gane» el combate dialéctico si al día siguiente se evidencia que no dijo la verdad ni en el nombre?

Pero puestos en ello, creo que el vencedor fue el formato. Los candidatos debatieron, intercambiaron argumentos dentro de que a la menor desviaban y tendían a soltar los chorrazos que se habían aprendido para meterlos a capón, pero en general, la moderación y el desarrollo fueron adecuados. Cada uno de ellos fue a soltar su mierda y dar una idea de lo que ofrecen y así quedó reflejado en el tiempo de que dispusieron. Para eso debe servir un debate electoral, para que la gente vea el percal, lo que se mueve en el mercado, aunque a estas alturas no se descubra gran cosa ni sea muy probable que haya trasvase entre Vox y el resto.

El nivel de mentiras, igual por lo de Silvia Intxaurrondo con Alberto, fue menor que en otras ocasiones no siendo que, ahí observamos el bien que hace el periodismo de verdad, no hacer la estatua y enfrentar a un candidato a sus mentiras: el siguiente ya se lo piensa dos veces, aunque Abascal volvió con los violadores cuando le hablaban de la violencia doméstica.  Por lo demás Yolanda estuvo en su línea y Sánchez igual, en su línea baja, ha hecho una campaña bastante penosa, desconozco los motivos, y aunque redujo de manera considerable el catálogo de mohines que restan mucha credibilidad, volvió a estar falto de aplomo como si estuviese más cómodo en el papel de candidato que de presidente.

Aqui un inciso, respetos mil a Silvia Intxaurrondo por hacer lo que debiera hacer cualquier periodista, porque todos somos conscientes de que no solo estaban en juego la valentía de rebatir a un tipo y exponerlo en su mentira, igual que ya le sucedió con Ayuso, todos asumimos que si el PP entra al día siguiente la pondrán de patitas en la calle. Que sea excepcional lo que debiera ser la norma, o que sepamos que sucederá a alguien que hace bien trabajo es otro indicador de lo pocho que está todo.

Pero en resumen, dudo que nadie tenga mucho que objetar al formato, salvo claro, la indigente de AR que no debe saber por donde tirar para explicar el papelón de Albertiño, ni que dude que lo visto mejora sustancialmente, al menos no ofenden al espectador, a la pantomima de Vallés y Pastor.

El Retroceso.

Cualquiera que haye escuchado o leído entrevistas de Perez Reverte reconocerá uno de sus comentarios más recurrentes. En España hay cierta tendencia a vernirse arriba cuando el clima mundial es propicio y llevar reformas y avances sociales más lejos que nadie sin reparar en que los ritmos de las sociedades a veces piden calma y no tempestad. Estos avances hacen que los pesos muertos del españa, que son los mismos desde hace siglos, iglesia, nobleza (ahora trasmutados a empresariado), grandes propietarios entren en pánico, les entre el vértigo, hiperventilen y muevan todos sus resortes, que siempre son más y más brutos, para recobrar el poder por lo civil, o, si es necesario, por lo criminal. Les importa tres higos, y ahí, dice Reverte, nos llega el retroceso que suele ser bastante bestia y nos deja temblando.

No se precisa la perspicacia de Arturo para constatarlo, es decir, no pongo en duda la perspicacia reporteril de Reverte, me refiero a que basta con hacer un seguimiento de textos legales o de la historia del país. Los textos constitucionales anteriores a la guerra civil son claramente pendulares, las mismas leyes educativas actuales siguen la misma lógica de contraccion-expanción. Importan tres pitos quienes debieran ser los principales sujetos de protección de la ley en cuestión, importa que un partido deje su impronta y el otro, la borre. En cierto sentido hoy día españa no es un ejemplar único en la polarización, que muchos nefastos populistas han encontrado rentable (Trump, Bolsonaro, Meloni), pero si que somos bastante pioneros, España ya era bipolar antes de que se considerara que un país pudiera serlo. España lleva tiempo siendo un acordeón.

El problema de los retrocesos es que siempre encuentran cenutrios y modorros que encuentran en el clima de ceporrez banda ancha para dar rienda suelta a su paleta naturaleza. Vuelvo a citar esta vez a Gabilondo, Iñaki, lo peor de Franco es que criaba franquitos, memos y anormales de barrio o aldea que interpretan que cuando mandan los suyos quienes mandan son sus cojones y pueden hacer y deshacer con impunidad, que es lo que querían desde el inicio. En general es gente limitada que carece de capacidad para ir más allá y jamás han asumido que el tema democrático va de respetar la voluntad de todos asi como su diversidad. Si Ayuso reproduce el que te vote Txapote, ahora lo encontramos pintado en las fachadas de clubes nauticos o coreado en bodas de cayetanos, y lo que es peor, hasta gente «normal». El cretino siempre lleva más allá el juego del político, porque no quiere o es incapaz de discernir entre juego y realidad. Bueno Ayuso además también es bastante cretina.

Ayer un alcalde cancelaba una obra de teatro de Ana Belen, la anterior otros una sobre un maestro repúblicano, otra donde dos mujeres se besaban, otro día mandan retirar las banderas arcoiris que no dejan de ser simbolos bastante inócuos y otro llaman a invertidos o transexuales enfermos crónicos y degenerados. Lo harán, y peor, se vanagloriaran de hacerlo. Si ya es complejo asumir a un tarado como Feijoo o a un impostor como Abascal, aguantar al cacique de barrio tiene pinta de que va a ser una cosa insufrible. Y me temo que esto solo ha hecho que comenzar.

Feijoo: Indecente, mentiroso, mal gestor y un poco gangoso.

Parte de la deficitaria campaña de Sánchez contra Feijoo esta otra cuestión que se ha pasado por alto y que bueno, parece de cierta importancia, incidir en que cojones tiene que ofrecer como candidato un tio como Feijoo a sus alturas de la vida.

Cuestionado por su bagaje, Feijoo suele aferrarse al lema mongol de sus mandatos en Galicia. Eso bueno realmente no dice absolutamente nada. En un político menos aún, quiero decir, desde Castilla y León puedo asegurar que tenemos perfiles que no se despegan de la silla durante años sin que nadie acierte a saber que ofrecen a cambio. Hay una gran masa de voto mayor que vota simplemente por inercia y que no se cuestiona esas cosas. Galicia no es muy diferente en cuanto a la demografía.

Pero cualquier recruiter o personal de Recursos Humanos le hubiera preguntado de forma inmediata una cosa, ¿Y cuales considera que han sido sus logros durante ese periodo?

Aqui el bueno de Alberto cortocircuitaria como siendo entrevistado en la Primera, la verdad cuesta saberlo. Desde luego no cifras. diferentes medios coinciden que sus resultados no son especialmente buenos. Con Alberto ha subido la deuda, al tiempo que se ha privatizado la sanidad y mochado los servicios públicos. Feijoo malvendió las cajas, hizo chanchullos con Pemex a cambio de contratos que nunca llegaron (gran parte de los ejecutivos de Pemex fueron a la carcel), etcetcetc Feijoo atendiendo a sus resultados es en esencia es un gestor de mierda siendo generosos. Del pelotón si se quiere atendiendo a como está el patio, pero de la parte de atrás. Eso sí, para la prensa local nunca le faltó el euro.

Por que en esencia Feijoo, además de tener la ética de un mono de gibraltar, de ser tartaja, de mentir a discrección es un tipo fundamentalmente mediocre, malo, sin valor. Su presencia al frente del PP solo la explica un hecho poco edificante. Casado era aún más tonto. Feijoo, apadrinado por Romay Beccaria, llegaría al Madrid de Aznar y debió causar tal impresión que no pasó de Correos. No, no lo querían cerca de los circulos de poder. Rajoy tampoco decidió echar mano de él, lo que solo puede indicar eso, o todos saben que es muy tonto, o que no es muy de fiar. Cualidades ambas interesates para un candidato a presidente.

Descartado de las grandes ligas Feijoo se refugiaría en Galicia, donde Fraga ya reinaba hasta ahora, ya con sus buenos años y sin nada interesante en la maleta y ahi lo tenemos, indecente, mentiroso, gangoso y mediocre. No hay quien de más. La cuestión es porqué a nadie se le ha ocurrido preguntar.

La calamitosa campaña de Sanchez a manos de gente que cobra mucho para la mierda que hacen.

Todo parecía ir bien durante los primeros compases de la contienda. Las encuestas le daban no favorito, algo que dónde Sanchez siempre se ha sentido cómodo y de donde ha sacado bastante partido y Sanchez abría la fiesta visitando platós de popes del baratillo periodístico que, por alguna razón, se creen unos geniazos merced a las mentiras de los palmeros de que se rodean y a quienes pagan el sueldo. Sánchez efectivamente toreó a Motos, y se zumbó a Ana Rosa, que a fin de cuentas, siempre ha sido una pavisosa incapaz de pasar de la entrevista jabonosa a quienes la financian pero que nunca ha sido especialmente rapaz en entrevistas agresivas.

Todo parecía ir bien, al menos en cuanto a imagen, hasta que en el «debate» Feijoo lo aturulló con un arsenal de bulos que nadie iba a cortar. Sanchez perdió la mano, o el viento a favor pero decidió que de aquello al menos podía añadir al temor razonable a un Vox en las instituciones la baza de las mentiras oprobiosas de Forrest.

Sin embargo y de nuevo Sánchez, o su equipo, no parecen enterarse muy bien de que va la película. La baza de los pactos con Vox no amedrenta al votante del derechas más tibio, no lo hizo en Madrid, ni en Andalucia, ni en Castilla y León. El votante de derechas no ve a Vox como un rival, o como una amenaza. Ambos estan juntos en la pretensión procustiana de amoldar a los ciudadanos a el perfil que ellos determinan como ortodoxos. Tanto al votante del PP como al de Vox le produce el mismo repelús el catalan, el vasco, el homosexual, o las feministas. El votante de derechas está feliz sabiendo que su voto servirá para joder al inmigrante, al pobre, al marica, a la feminazi o al antiespañol. Que lo haga PP o Vox, tanto les da, y Sánchez no se ha dado cuenta tampoco aún de que el temor a la extrema derecha no genera un gran voto en contra de ese pacto. En consecuencia, a la hora de la verdad, carece de contrapeso a ese odio tan genuino del rancio hispano y nadie parece tenerle gran miedo.

Pues bien, parece que aún no se han enterado. Amigo Sánchez, ya te lo han dicho varias elecciones, no vayas por ahí, nunca debiste ir por ahí.

Lo mismo sucede con las trolas de Feijoo. A estas alturas denunciar las mentiras sonrojantes de Feijoo es idiota, idiota e inútil. Quienes le conocen saben de sobra que su territorio habitual son los fangos que van de las medias verdades a las trolas puras y duras. A Feijoo mentir no le importa una puta mierda, es un tío que se bronceaba en el yate de un narcotraficante, que cojones le va a importar retorcer datos. Y a sus votantes tampoco. Muchos de ellos llevan tiempo no queriendo saber quienes son M.Rajoy, ni Marcial Dorado ni renunciar a dormir tranquilos tampoco.

Asi que Sánchez ha basado el grueso de la campaña en luchar contra el pacto con Vox que ni frena ni genera nada y la mentira, tratando con ambos argumentos de hacer dudar a una gente a la que, en gran parte, se la suda ampliamente que se pacte con Vox o el miedito les mobilice y tampoco que su candidato mienta (y sea tartaja) o que fuese amigo de un narcotraficante. Y claro no ha funcionado gran cosa.

Aparte de este error bastante grueso Pedro, desde el principio, decidió que era una buena idea desmarcarse de la parte de Podemos, donde, curiosamente, estaba Yolanda Diaz. Esto en general no se si es buena o mala idea, pero no te deja muy bien como compañero o cogobernante, más habida cuenta de que, uno, Podemos tenía su buen número de votantes, y dos, gracias a Podemos se impulsaron muchas de las medidas más pintonas, subida del SMI, Pensiones, Ayudas sociales y demás. Pedro, uno no reniega de sus compañeros de aventuras a las primeras de cambio, menos cuando es más probable que menos que vuelva a ser necesario el entendimiento de darse la situación. Eso no suma mucho, en cambio te hace quedar como el puto culo. Tampoco se lo dijeron. Uno defiende su equipo, aunque sepa quien es el que atufa.

Con toda esta serie de despropósitos, insisto, bastante palmarios algunos de ellos y recientemente demostrados, igual tampoco la cosa hubiese variado mucho en cuanto a resultados. No creo que nadie sepa muy bien que tiene en la cabeza el votante indeciso que es, a fin de cuantas, quien decide esto. Pero al menos creo que Pedro hubiese honrado su labor y se hubiera ido, de tener que irse, dejando el mensaje inequívoco de que los datos macroeconomicos no son malos, de que se propuso dar cierto cobijo a amplias capas de poblacion y de que se salió mas o menos bien de una situación complicada e inédita. Hubiese dicho ahora si sale el mongolo tendreis lo que os mereceis, un gangoso que miente más que habla y con la ética de un mandril. Pero tras esta campaña calamitosa dudo que deje siquiera cierto buen recuerdo.

El PP es el sarcoma del país

Dentro de la penosa campaña que ha diseñado el equipo de Pedro, una gente que se lleva sus buenos billetes por ello, destaca para sorpresa de propios y extraños la figura de Zapatero. Al contrario que figuras pasadisimas que han dado pena reclamando un poco que asito diciendo chorradas como Guerra, bueno, Guerra siempre fue un caso de hacedme casito, parece que hervor que le faltó en su momento a Zapatero se ha trasformado en un poso de sensatez y cierta habilidad para evitar las trampas de trapaceros como Ferreras.

El otro día por ejemplo Zapatero incidía en algo de bulto. Es un error centrar la campaña en el miedo a Vox cuando el mayor peligro es y ha sido siempre el PP. De hecho, podemos aventurar que si Vox está ahí es porque es util, mientras que Ciudadanos, que era un back up, un proyecto de reemplazo, dejó de existir por perder su sentido. Pero Vox sigue haciendo el trabajo sucio, Vox es el poli malo, mientras el PP hace de poli bueno. El PP dice de manera subliminal, votanos a nosotros que somos sensatos, cabales, decentes, porque la alternativa son estos, que no atienden a razones, que no conocen.

Sin embargo afirmar que el PP es una opción sensata, moderada o decente es mucho decir. Nunca lo han sido, y nada parece indicar que lo vayan a ser, porque en esencia siguen siendo los mismos. Feijoo era uno de ellos, ni siquiera de los mas brillantes porque no pasó de correos, pero era del círculo de los Romay Becaria o Rajoy. La estrategia del último debate parecía sacada del librillo de MAR, el mismo detrás de poner voz al guiñol de Ansar. Tipos como Bendodo parecen estar pidiendo plaza en Soto del Real antes de entrar en el gobierno, porque acabaran comiendo celda, lo sabe todo dios.

La realidad es que el PP sigue siendo igual de corrupto porque es una organización corrupta y nunca ha dejado de serlo. Pero bueno, podría tolerarse cierto nivel de corrupción habida cuenta de que, a la vista está, al votante le incomoda lo justo mientras que quienes voten sean los suyos. Eso se compensaría si efectivamente mientras hacen sus negocios fuesen sensatos, o cabales. Pero la realidad es que son tan cerriles como Vox, porque que es Vox más que una excisión suya, de entre los anormales, los enfermizamente anormales. Por eso el PP se ha opuesto a cualquier tipo de proyecto o propuesta de avance social, basta con ir a la hemeroteca. Aborto, eutanasia, divorcio, memoria histórica. El PP siempre ha sido el modorro que se oponía a todo y que cuando llegaba al poder no lo derogaba. Porque se trata de corromper, de azuzar, de disgregar, no se trata de proponer o construir, el PP no construye una puta mierda, salvo sus patrimonios.

Pero mira, incluso podríamos decir, mira, son corruptos, son modorros, pero oye, cuando les cae alguna mierda salen bien parados. Pero aqui tendríamos que pensar en el Yak, en el prestige, en el Alvia. Cualquiera de las mierdas que les han tocado se han saldado con soluciones de Manos a la obra, no solo chapuceras, muchas veces pisando lo delictivo. No amigos, el PP gestiona como la puta mierda, en mar en calma y peor aún, en temporal. Ni siquiera en circunstancias extremas, como vimos como la pandemia, dejan de buscar el rédito electoral y siempre encuentran el palo que poner en la rueda.

Zapatero tiene razón, el peligro no es Vox, quiero decir, siempre que a la gente no se le vaya la pelota del todo. El cáncer es y siempre ha sido el mismo.

Kundera entrega la cuchara

Uno de los puntos distintivos de los pueblos moribundos es el poste de la luz donde ponen las esquelas. Puede ser un poste de la luz, o un tablón o una tapia. Como atraidas por la funesta vibración se van acercando las diferentes señoras (preferentemente) a echar un vistazo al anuncio. Una frunce el ceño, hace memoria, cree recordar, luego se acerca otra, y otra y hacen el corrillo. Este estaba en madrid, con los hijos, ah, pues no caigo, si hombre, concuñado de la patas de alambre, pero esos no estaban en santander, no, ese era el primo, que anduvo en lo de la luz. Vaya. Otras veces si el finado es joven o la cosa ha sido inesperada no falta el estuve hablando ayer mismo con él, o con la hija, como si la parca fuese a decir, hostia no, que ayer estuvo hablando con la Engracia, se va a llevar un mal rato la mujer con lo mal que anda de la tensión. En las ciudades por supuesto no se pone esquelas en los postes de la luz, se ponen como mucho en el tanatorio, se desarrolla un poco para que uno no encuentre semejanzas con los carteles de Enlace de Manoli y Luis de los restaurantes y le de por pensar.

Eso es un poco en lo que se han convertido las secciones de literatura en las páginas, si hago recuento estos días van Kundera, MacCarthy, Amis.. venga Gala también y alguno más. Aparecen a media página y luego en comentarios se van acercando los sufridos y cada vez más menguantes lectores, «hace tiempo que no hacía nada», «si es que tal como está el mercado para que vas a escribir nada decente». La realidad es que la única manera que tiene la literatura de hacer pole parece ser entregando en sacrificio escritores conocidos, es decir, de la literatura ya solo interesan los muertos. Otra cosa que se me ocurre es que cuando vayan palmando cuatro más el tema literario no solo habrá perdido a los titulares, tampoco se me ocurren suplentes.

Por volver con Kundera las cuestiones que flotan en todas las necrológicas es si es un autor de juventud, es decir, que da cosa o pereza leerlo despuées de los 30 y dos, si se puede o no considerar un One Hit Wonder, es decir, autor de un pepinazo que no podría reproducir después pese a intentarlo de todas maneras repitiendo ingredientes.

Respecto a la primera tengo mis dudas. Si, parece que esa es su franja de edad, pero si, también era la edad que tenía yo al menos cuando Kundera era popular. ¿Lo leería ahora? No se, a priori no tengo mucha urgencia por hacerlo. La segunda parece menos discutible, si tiene más libros pero nada que se acerque al pico de La insoportable levedad. Era un One hit wonder, disimulado si, pero vaya.

Dicho eso parte de la popularidad de Kundera se la dió las circunstancias que vivió, aunque su imagen de fugitivo del comunismo (algo que daba puntos a cualquier intelectual) no dejase de verse empañada en los últimos tiempos cuando se conoció que antes había sido delator para el régimen y contribuido a que gente se comiese sus buenos años de cárcel comunista. Juzgar eso sin tener en consideración el clima social siempre será engañoso. Otros se afiliaron a las SS, pero eso no quiere decir que estuviesen buscando judios a los que chamuscar, sino que igual todos lo hacían, o no hacerlo equivalía a ponerse en el punto de mira. El ser humano hace cosas peores por menos.

Hablando de La insoportable, aparte de un título que cumple con todo lo que debe cumplir un título, creo que describe bien su literatura, algo emparentado con un Auster, o incluso Murakami por buscar referentes contemporáneos pero claro, con una mochila vital más rica, variada (y pesada). La literatura de Kundera es de la que se fija en el lado etéreo de la humanidad, las cosas nobles, no hay cacas, ni mocos ni fluidos, no huele, no mancha, es un poco literatura si se me permite la etiqueta «a que huelen las nubes», que no pasa nada, la parte etéera es también parte de la condición humana. La Insoportable la puede leer cualquiera, es más, la debe leer cualquiera. A mi al menos en su momento no me disgustó, que sea una literatura algo pedorra no quiere decir que no tenga su momento. Conocería eso di una adaptación algo plúmbea con una Binoche bastante decente y un Day-Lewis que no sabía muy bien que hacía en esa función.

El resto de su producción se movía en parámetros por decirlo de manera suave, con aires presuntuosos que rara vez honraban sus pretensiones, quiero decir, está muy bien tirar a lo gordo y titular tus libros como La ignorancia, La identidad, o este ya, La inmortalidad, casi imposible pronunciarlo sin que resuene un eco. Cualquiera diría que quedó un poco escocido de excederse con la insoportable levedad del ser, pero la realidad es que como digo, me parecieron un puto coñazo bastante insufrible que desde luego no estaban a la altura de sus nada modestos títulos. Como fuere, buen viaje.

El fin de la política

La aparición de Podemos como alternativa más o menos seria, al menos impredecible, provocó el pánico en los poderes económicos del país. Si hay una cosa a la que tiene alergia el dinero, quiero decir, la acumulación de dinero, es a la incertidumbre. Luchar contra Podemos por tanto fue una constante desde su nacimiento. Aparte de la lucha directa a través de los tentáculos mediáticos que, sobra decir, pertenecen al dinero, plantearon planes B. Uno fue Ciudadanos, hoy amortizado, luego vendría Vox y el resto.

Sin embargo la etapa de los «extremismos» parece cosa del ayer, y los poderes vuelven a celebrar el retorno del bipartidismo, la alternancia, algo mucho más manejable y, por tanto, menos impredecible. Todo vuelve a como debería ser, a ser como dios manda.

En ese escenario el debate entre los candidatos principales en las próximas elecciones debía ser una especie de bautizo del nuevo bipartidismo. Que ninguno esté en condiciones de gobernar en solitario es un detalle que, estimo, consideran coyuntural. Los planes de los poderes económicos, son los únicos dignos de llamarse poderes, es que tanto Vox como Sumar vayan desapareciendo y para ello que mejor manera que comenzar borrandolos del mapa.

El problema el debate retrató a ambos candidatos en su insufrible mediocridad. Hay que considerar de entrada que Feijoo rechazó otra ubicación que no fuese A3 Media. Que un candidato a presidente solo se fie de una empresa privada es un detalle no menor. Tal vez considera que las televisiones públicas obedecen al mandato del amo porque bueno, ya saben, no por que durante su mandato hubieran multiples protestas por el uso torticero que hacía de la tele gallega, uno de los pilares mediáticos en que sustentó sus victorias.

A3 media trató de pasar desapercibida y para ello se propuso tal vez el peor de los formatos posibles habida cuenta de los personajes que lo iban a protagonizar, una mesa y dos tipos dispuestos para que se enzarzaran sin ningún tipo de moderación más allá de la asignación de tiempos, que para eso ponen un reloj de ajedrez y listo. Considerando que el moderador hubiese sido Vallés no es mala opción pero por otro lado dejaba la puerta abierta a lo que sucedería, salvo que el propósito fuese retratar a ambos en su mediocridad este formato con estos protagonistas es una basura.

Y lo que sucedió fue una sucesión a veces inconexa de gilipolleces, para terminar pronto, un incómodo holocausto de la inteligencia política en forma de vergonzante espectáculo. Debatir a grandes rasgos, es hablar de un tema para llevarlo a algún punto o desarrollo. Sin moderación aquí los candidatos lo que se dedicaron es a soltar los chorrazos que les habían preparado sus respectivos equipos sin ningún tipo de rebozo ni propósito constructivo, ni siquiera de mantener un mínimo de coherencia discursiva. Que si, que queríamos que se diesen tortas dialécticas y que ganase el nuestro, pero tortas dialécticas con un mínimo de sentido.

Si le preguntaban a Forrest por la violencia de género y lo que escuecen estas cuestiones a Vox, este respondía que Sánchez soltaba violadores y pederastas a la calle. ¿Que tiene que ver la Ley del Si es Si con la violencia de género? Efectivamente, nada. Pero nadie interrumpía a Feijoo para decirle, no digas soplapolleces, anormal. Así mintió en todo tipo de datos económicos, empleo creado, número de autónomos, en que partidos acordaron un pacto nacional contra la violencia de género que por alguna razón se empeñó en que no fue aprobado por Podemos cuando solo Vox se mantuvo al margen, etcetcetc. Hubiese sido interesante saber si en la entrada de A3 dijo su nombre real.

Ambos tiraron de Goebbels, porque aqui esta todo inventado desde hace tiempo metiendo a capón términos ancla o comodín, viniesen o no a cuento, y luego Feijoo hizo un uso abusivo de otra técnica conocida como el Gish gallop o galope de Gish que era un señor bastante tramposo en el tema de debatir y que consiste en responder soltando una andanada de argumentos falaces vengan a cuenta o no con el objeto de distraer otro debatiente que primero pierde su hilo discursivo y luego trata infructuosamente de apagar los fuegos. Que en wikipedia lo llaman galope de Gish, pero es lo que hace el tonto de mi pueblo cuando le dicen que porque no se ducha más a menudo. Feijoo utilizó la técnica del tonto del pueblo, tu pregunta que yo agacho las orejas y respondo lo que me da la gana. Porque, repito, me lo consienten.

Así nadie rebatió la andanada de mentiras que fue soltando, ni nadie le dijo que dejase de hacer el ridículo modorro pidiendo de forma insistente sin que viniese a cuento a Sánchez que firmase un acuerdo de lista más votada cuando en la mitad de las autonomias que gobierna el PP con Vox lo hacen contra la lista más votada. Podía ser eso, una cita con el proctólogo o un albarán de un pedido de agua embotellada, no sabemos que había en ese papel que ponía una y otra vez en la mesa pidiendo que se lo firmasen. Feijoo hizo buena otra ley universal de la dialectica, nunca discutas con idiotas, porque te llevan al barro y te vencen con su experiencia.

A esto hay que decir que Sánchez no encontró la manera efectiva de abordarlo. Tuvo momentos salvables, cuando no tenía que dialogar y podía centrarse en lo suyo, pero fue en exceso respetuoso con lo que se le planteaba y estuvo sobrado de mohines. Con el tonto del pueblo no se discute, no se le rebate, no se entra a su juego. El tonto del pueblo al fin y al cabo no tiene otra utilidad ni propósito constructivo que reirse de él y mantenerse apartado a una distancia suficiente para que no te suelte una hostia a mano abierta como acostumbran sin transición. A esa conclusión llegó el saber popular tras décadas de experiencia en el tema, le puedes dar las vueltas que quieras, pero al final es el tonto del pueblo por un motivo. El problema aqui es que ridiculizar a Feijoo, por fácil y evidente que fuese, podia resultar fuera de lugar o sonar irrespetuoso y contraproducente de ahí que fuese descartado. A mi sin embargo no se me ocurre nada mejor que hacer con este individuo.

Personalmente he de decir que, sin entrar a las subnormalidades que de Feijoo, su mera apostura, su gangosidad, su ceporrismo, me provocó escalofrios de incomodidad y no hablo en sentido figurado, realmente me pareció tan tróspido y grimoso que me hizo torcer el gesto varias veces. Que un tipo tan de segunda división haya llegado a competir en primera y pueda llegar a ser presidente de españa es algo que da bastante miedo solo de pensarlo, pero como hay que decir algo bueno hay que agradecerle que nos haya ahorrado el suplicio de más debates. Lo que si es seguro es que en este debate todos perdimos, bueno, todos menos quienes afirman que el nivel de la política cada vez conoce niveles más bajos.

Vox son una panda de memos.

La entrada de Vox en ayuntamientos y comunidades nos van dejando un reguero de muestras de lo que tienen que ofrecer a la sociedad y el mundo en general. No es que sorprenda. De momento se han cancelado obras de teatro en diversos puntos por motivos varios, desde contenidos inmorales o sexuales (de acuerdo con sus criterios morales) a, bueno, una de un maestro republicano. Otras de sus medidas para mejorar la convivencia social y mejorar la vida de los ciudadanos es prohibir banderas lgtbi y dar imagenes penosas apartandose con su propio cartel en las manifestaciones asesinatos de mujeres. Podrian simplemente no ponerlas o no acudir, pero no es su estilo, hay que ser modorro, y que se note. También se han subido el sueldo para acabar con el despilfarro de lo público, el despilfarro es lo que ganen los demás, aunque sea menos.

Hoy mismo leía gente, del teórico ámbito de la cultura, que minimizaba los efectos de estas cancelaciones apoyado en dos argumentos, estaban sucediendo en sitios nimios, como Argamasilla del campo, y dos, porque quienes se quejan son antifascistas de salón. Gente que no ha luchado por nada en la vida, dice, igual él es veterano de la guerra de los balcanes, pero no tiene pinta. No vamos a volver con el manoseado hasta la nausea texto de Primo Levi, pero igual si esperamos a tenerlo en capitales de provincia (el autor no espedifica a partir de que tamaño debiera preocuparnos) la cosa ya es demasiado grande, por otro lado tampoco se que sugiere con la lucha que le pide a los antifascistas, igual que agarren hoces y martillos y persigan a Ortega Smith al grito de guerra somos los bolcheviques. Es bastante asombroso que gente que presume de racional defienda tamañas soplapolleces apoyados en sus prejuicios personales contra gente como PAM. Pero bueno, allá cada uno. Luchar contra esta necedad es tan simple como no votarla, ni a quienes la facilitan.

Es evidente que Vox no cancela cosas o se retira de manifestaciones por el fondo de la cuestión. El mismo autor anterior a que me refería ha registrado muchas veces que somos posiblemente la sociedad con mayor número de gente alfabetizada de la historia y que, paradojicamente, menos afecto tiene a la cultura. Tener acceso libre a algo le quita cualquier atractivo. Si la gente en general no se pirra por una obra de teatro en Cercedilla de la Sierra, tampoco es un salto de juegos olimplicos afirmar que los de Vox menos. Son más de caza, burdel y matanza, las cosas como son. Tampoco es que sea necesario una gran carga de contenido cultural para retratarlos en la miseria de sus contenidos. La cúpula de Vox es una panda de golfos ociosos que han comprado la franquicia Bannon y adaptado mínimamente al mercado autóctono. Pero que Abascal o el mismo Memo Smith sean unos fantasmas no sería un problema si no fuese porque la mierda que venden se ha probado efectiva en una gran masa de cenutrios con la capacidad crítica anulada o anquilosada. Y como sus números de circo tróspidos funcionan los ejecutan una y otra vez, sin que, creo, les importe gran cosa los efectos en la convivencia social. Los de Vox son ceporros porque es su negocio, su modo de vida, aunque sea a costa de luego el patan de la calle se parta la crisma.

No amigos, Vox cancela cosas no por, como decía Manquiña, cuestión de formas, sino de alardes, para existir, sobre todo frente a los mermados que les votan, Vox necesita salir y hacer estos números, cancelo esto porque puedo, y porque me sale de los cojones, fundamentos que quien tenga más edad seguramente recuerde aunque creyesen olvidado.

El problema es, a mi juicio, de mesura, de medición. Sospecho que un gran número de personas interpretan estas cacicadas subnormales como inofensivas, folclóricas, numereras porque efectivamente lo son Pero lamento darles una noticia desagradable. Cada vez son más numerosas y més extendidas. Estos movimientos generan olas, y al patán que cancela una obra por que la dirige un rojo (a su juicio), le sigue otro que sube la apuesta y termina con otra paletada mayor y más arbitraria. La espiral de estupidez no se desinfla sola, y menos si Vox entra en un hipotético gobierno de la mano de alguién tan acuoso como Forrest Feijoo.

Vox, sus líderes de mierda y la cortedad de los que votan esa basura nos han causado (al menos a mi) mucha risa por lo estúpido de su mera existencia y discurso (sospecho que hace 100 años me hubiese descojonado igualmente de los hijos del primo de Rivera). Bien, hay una gran masa estúpida ahí fuera. Y una aún mayor a la que no le importa que entren en los gobiernos siempre que derroquen al diablo de verbena que ellos mismos se han creado. Se pueden relativizar todo lo que se quiera, pero una cosa es impepinable, no traen nada bueno, no hay que esperar para sacar el paraguas hasta que llueva.

El sanchismo no existe, era MAR harto de orujo.

El paso de Sánchez por el programa de AR se saldó de nuevo con la anfitriona como gran damnificada. AR, sus empleados, su fiel audiencia, confiaban en que la vieja reina sacase los cuchillos de destripar marrajos y dejase a Pedro para los restos, pero en su lugar Sánchez se acercó a AR como una de las insufladoras del invento del «sanchismo», sacó la aguja de coser, y pinchó la burbuja recreandose al verla estallar en el aire mientras la susodicha asistía impotente haciendo la estatua. Y un amago de no respirar.

Puede que los amos de lo mediático caigan en su presencia presas de un efecto de Stendhal y sucumban a la hermosa presencia del lider y sus encantos. Pero encuentro más factible que confrontados en su mentira y sin la complicidad de unos tertullianos a quienes ellos eligen y que pagan y que por tanto estan obligados a reirles sus gracias y aplaudirles sus desvaríos, estos popes de barrio se revelen como unos pobres diablos incapaces de ofrecer mínima resistencia a su rival, ni jugando en casa con el público a favor, por más que anticipen las visitas del presidentes como un camino de espinas.

Sánchez se folló a Motos, y después a Ana Rosa y en mediaset se respiraba gatillazo. Se entiende que Feijoo no tenga ninguna prisa por enfrentarse con él, porque al igual de los anteriores carece de argumentos, pero además va corto de presencia, discurso, dominio del escenario y hasta del idioma. Y es un memo también.

Para explicar estas ejecuciones interruptus aparte de su propia incapacidad, y porque no son ni remotamente lo geniazos que se piensan, otra buena parte de que no den la talla deriva del hecho fundamental de que Sánchez tiene los ases en la mano. La economía va, aparentemente, bien, la decisiones tomadas, comprensibles o no, han dado escenarios mejores o más tranquilos (Cataluña), los principales flancos debiles han pasado (pandemia) o se han atribuido a gente que ha sido borrada del mapa (Montero y la ley del si es si) y el resto, el resto es el Falcon, la frase de un desequilibrado de callejeros (que te vote Txapote) es decir, lo que queda es el Sanchismo.

Y el sanchismo siempre ha sido una invención, un trampantojo, un engaño perjeñado por MAR a tope de orujo y para evitar decir de frente que lo único que tiene el PP es crear un demonio de verbena y atizar por lo personal, porque carecen de cualquier tipo de propósito o alternativa fuera de ponerse ellos, y Vox, para convertir todo en un sainete.

A Ayuso, quien de todos modos no iba a enfrentarse con Sánchez, le funcionó precisamente por ello, nunca tuvo que confrontarlo con nadie, usar el sanchismo cuando ninguno de tus rivales era Sánchez y nadie iba a defenderlo era cómodo. Pero donado a sus hermanos de partido y utilizarlo cuando el mismo Sénchez te puede desmontar de un sopapo se está antojando mas complejo. Lo único que ha caracterizado y explica a Sánchez de manera más o menos consistente durante su vida política, lo único asimilable remotamente a un sanchismo, sería su capacidad de supervivencia en situaciones adversas, y ellos le estan ahora mismo dando el escenario que precisa, que le llegue o no es lo que esta por ver.

La gran pregunta que me surge es porque Pedro, de quien nunca he sido particular fan ni votante, conste, permitió que creciese la burbuja sin dejar antes en envidencia a esta panda de indigentes. Supongo que él tiene la explicación.